Antes de empezar con las finanzas empresariales

La mayoría de empresarios se lanzan a gestionar sus finanzas sin saber exactamente qué están mirando. Y eso puede salir caro. No hace falta un máster en economía, pero sí entender algunos conceptos básicos que marcan la diferencia entre tomar decisiones informadas o ir a ciegas.

En 2025, las herramientas digitales facilitan mucho el trabajo financiero. Pero sin entender los fundamentos, estas herramientas son solo calculadoras bonitas que no te dirán realmente qué está pasando en tu negocio.

Aquí vas a encontrar lo que necesitas saber antes de meterte de lleno en la gestión financiera de tu empresa. Sin jerga complicada, sin teoría que no sirve para nada. Solo lo práctico.

Documentos financieros y análisis de datos empresariales sobre mesa de trabajo
Empresario analizando informes financieros y planificación estratégica

Los tres pilares que nadie te explica claramente

Flujo de caja no es lo mismo que beneficio

Puedes tener beneficios en papel y quedarte sin dinero para pagar a proveedores. El flujo de caja mide el dinero real que entra y sale de tu cuenta. Es la diferencia entre sobrevivir y cerrar en seis meses. Vigila especialmente los plazos de cobro si trabajas con clientes grandes.

Costes fijos versus variables

Los fijos son los que pagas aunque no vendas nada: alquiler, nóminas, seguros. Los variables dependen de tu actividad: materias primas, comisiones, envíos. Conocer esta diferencia te permite calcular tu punto de equilibrio y saber cuánto necesitas facturar cada mes para no perder dinero.

Margen versus rotación

Hay negocios que viven de márgenes altos y ventas bajas. Otros funcionan al revés: poco margen pero mucho volumen. Ninguno es mejor que otro, pero necesitas saber cuál es tu modelo. De eso depende tu estrategia de precios, tu inversión en stock y tu forma de crecer.

Lucía Mendoza, asesora financiera en Pontevedra
Llevo quince años ayudando a pymes en Galicia con sus finanzas. El error más común que veo es que los empresarios confunden actividad con rentabilidad. Están ocupados todo el día, facturan bien, pero al final del mes no saben dónde se fue el dinero. La clave está en dedicar dos horas cada semana a revisar números básicos. Solo eso cambia completamente la perspectiva del negocio.

Lucía Mendoza

Asesora financiera independiente, Vigo

Cuatro cosas que hacer esta semana

No necesitas esperar a tener todo perfecto. Empieza por estos pasos concretos que puedes aplicar de inmediato.

1

Abre una hoja de cálculo sencilla

No hace falta software caro. Una tabla simple con dos columnas: entradas y salidas. Apunta todo lo que entra y sale durante un mes completo. Vas a descubrir gastos que ni recordabas que tenías. Es incómodo al principio, pero funciona.

2

Calcula tu punto de equilibrio real

Suma todos tus costes fijos mensuales. Divide esa cifra por tu margen de contribución unitario. Ese número te dice cuántas unidades necesitas vender para no perder dinero. Si te parece inalcanzable, tienes un problema de modelo de negocio, no de marketing.

3

Revisa tus plazos de cobro y pago

Si pagas a 30 días y cobras a 90, vas a tener problemas de tesorería tarde o temprano. Mira si puedes negociar mejores condiciones con clientes grandes o buscar alternativas de financiación para ese desfase. El confirming puede ser útil aquí.

4

Separa cuentas personal y empresarial

Parece obvio pero mucha gente lo mezcla. Hazte dos cuentas bancarias diferentes desde hoy. Tu negocio es una entidad independiente, y tratarlo así desde el principio te ahorra dolores de cabeza fiscales y te permite ver realmente si tu empresa es rentable.

¿Quieres profundizar en finanzas empresariales?

Ofrecemos talleres prácticos en Vigo durante el último trimestre de 2025. Grupos reducidos, casos reales, sin teoría que no sirva. Si prefieres orientación personalizada, también trabajamos con empresas de forma individual.

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